lunes, 16 de noviembre de 2015

El monstruo del machismo invadiendo los terrenos interiores...

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.

El monstruo del machismo invadiendo los terrenos interiores...
-Por Sarah Russek de Weiss
¿Por qué los hombres tienen que aprender a ser Hombres? ¿Por qué se le dice al joven una y otra vez, “Tienes que ser un hombre”? ¿Por qué en tantas culturas del mundo no se da naturalmente la masculinidad, como sucede en el caso de la maduración física?
                El machismo TRUNCA ESE PROCESO NATURAL  Y AMENAZA EL DESARROLLO ADECUADO DE ESE PROCESO DE CONSTRUCCIÓN DEL SER. El machismo sucede cuando la sociedad le dicta al chavo o a la chava una serie de “características  -supuestamente- deseables para su género” que se traducen en ciertas actitudes y elecciones respecto al uso y  el abuso del poder sobre otros u otras.
El machismo,  metafóricamente hablando, es  cual monstruo o parásito, un  tirano que miente con todos los dientes la falacia más repetida en la historia y en múltiples culturas: le hace pensar al hombre que  “perderá su masculinidad u hombría”  frente a los ojos de “todos”, si no hace lo que el machismo le indique, o si el chavo no demuestra tener las  susodichas características machistas.  Así, le amenaza  para controlar al anfitrión con el peor castigo de todos: perderse a sí mismo y pasar vergüenza pública por ello.
Así, el monstruo del machismo, injerta la siguiente idea en la mente del niño o del  joven: que él deberá  demostrar capacidad de “dominio sobre otros” y/o en su defecto “otras” u “otra”, para ser considerado un individuo “valioso” y obtener así un supuesto reconocimiento por parte del mundo de “los adultos” o de los “pares o amigos”. Por lo tanto, el o la joven tratará de demostrar actitudes machistas, ya sean abiertas o encubiertas; puesto que  también existe un machismo “invisible”, o “políticamente correcto”.
Ahora, si bien a las mujeres el monstruo del machismo no les amenaza con perder su “feminidad” o con dejar de ser “mujeres”, si les amenaza con perder su valía a los ojos de los “hombres” o de la sociedad patriarcal, en función de su “castidad o servidumbre”, ya sea en su formación de  carácter casto (“apartada para un solo hombre o macho” o a través de “servirle” (incluyendo en el servicio su sexualidad e integridad condicionadas).  Paradójicamente,   muchas de ellas entienden a nivel subconsciente que si quieren adquirir realmente “valía”, y no ser consideradas “mujeriles”, deberán adquirir al igual que los chavos hombres,  algunas de esas “características supuestamente masculinas” promovidas por el machismo (incluso la “promiscuidad” o “temeraria sexualidad” entre otras) y no necesariamente a través de “estar ligada a un sólo macho encargado de administrar y disponer de su sexualidad.” Una u otra conclusión surge del mismo adoctrinamiento, por paradójico que sea.
El machismo es un camino que parece “fácil”, pero no lo es, representa sufrimiento y muerte interior, no vida interior;  dicta “una solución” supuesta más no la da realmente: sólo esclaviza a la persona, le destruye, y busca destruir a quienes le rodean también. Promete poder sobre otros, pero en realidad pierde el individuo poder sobre sí mismo,  se daña a si mismo, daña a otros y se desorientan todos…
El  camino real y verdadero, que habrá de tomar el joven o la joven  para convertirse en “Un Ser Humano que ha dejado de ser un niño o niña” es  muy personal y privado, el cual involucra entre otras cosas el elegir valores, ideales y experiencias afines a estos, así como el reconocimiento de las propias cualidades,  y la promoción personal de las propias habilidades y capacidades.
Empieza la construcción del Ser, por respaldarse a sí mismo, cómo un ser libre, que va más allá de la bravuconería del machismo. Implica estar centrado en la propia valía, en el auto reconocimiento de ésta. Pero sobre todo requiere cultivar la capacidad innata de empatía. El poder verdadero no es un poder sobre de otro, otra u otros, es el poder sobre el sí mismo. Y si se tiene ese poder, ser capaz de usarlo para hacer una diferencia positiva en la propia vida y en la de otros.

                Un Ser humano pleno, próspero, feliz, creativo, productivo, requiere una actitud proactiva –no reactiva ante presiones sociales, las cuales suelen ser de la más baja calidad de consciencia evolutiva.  Ser Humano, es un proyecto,  una serie de elecciones conscientes  por parte del adolescente en cuestión, y debo agregar del adulto en cuestión también, puesto que el camino de crecimiento interior PARECE (felizmente) IRSE ALARGANDO A LO LARGO DE LA VIDA. El ser considerado “Hombre” o “Mujer” en el sentido de la madurez interior verdadera,  requiere de un mayor involucramiento personal, de la propia consciencia, y más aún: de la propia Consciencia de la consciencia en el diseño personal del Ser. Requiere el cultivo del sí mismo. Así como un jardinero cultiva su más preciada flor. Somos Humanos, somos jardineros en el jardín interior: Y cultivamos así el Edén superior…

martes, 13 de octubre de 2015

domingo, 11 de octubre de 2015

Camino a la luz. Más allá de la mente dual, de las distorsiones cognitivas: una salida espiritual del laberinto.

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.

Camino a la luz. Más allá de la mente dual, de las distorsiones cognitivas: una salida espiritual del laberinto.

Por Sarah Russek


Los seres humanos somos seres de origen divino. Partículas cósmicas conforman nuestra materia o forma, y el espíritu más elevado habita  intrínseco en nosotros.  Somos  capaces de sentir amor y de ejercer libertad de elección. Por sus alcances, el alma humana es aún más elevada que los ángeles más excelsos. Y su capacidad de amor es más grande que cualquier ser que haya existido. Pues literalmente podemos abarcarlo todo… todos los mundos y todas las dimensiones. Somos creadores, constructores de realidades, de futuros, de presentes, de universos infinitos.

Sin embargo, nuestro desplazamiento en el tiempo y en las dimensiones, al ejercer la libertad de elección, y el tener al alcance  todos los paraísos,  nos hace vulnerables a errores, a desvíos, a caídas; a veces, incluso somos capaces de desviarnos de nuestro más íntimo ser o esencia. Cuando el ser humano  liga su voluntad a la ilusión de los opuestos, y dimensiona  la oscuridad, en lugar de reconocer su origen de Luz en el amor, no sólo no se construye, se  destruye.  Y destruye mundos con él.

La oscuridad no es falta de Luz, pues no hay un solo rincón del universo, de los mundos, y de las dimensiones, ni de los espacios ni de los tiempos, que no esté lleno de Él. De su Luz.

La oscuridad en el origen, era sólo un vacío creado en función de dar al ser humano la posibilidad de ejercer libertad y voluntad. Es una función cuyo propósito es finito. Pero este espacio vacío, se convierte en una ilusión de falta, de carencia, sólo cuando es recreado por la mente dual, del ser humano.

El problema es cuando la mente humana entra en un estado de juicio severo, de crítica, cuando busca imperfectos, cuando practica peyorativos. Cuando entra en una función dual del pensamiento. Cuando distorsiona. Cuando cree que carece… cuando sufre, cuando se duele. Entonces crea sufrimiento.

Sin embargo, cuando el ser humano ejerce su voluntad y libertad, para reconocerse a sí mismo más allá de la dualidad de la mente. Cuando sondea su ser, y se reconoce o identifica con la conciencia ligada al alma. Y reconoce la unicidad de su esencia en  el Todo. Entonces  alcanza el estatus de Creador, pues se habrá creado a voluntad a sí mismo, y estará completo.

Entonces, las decisiones a las que ligará su  voluntad serán en términos de colores y no en términos  de blanco y negro…

¿Es posible alcanzar ese estado en este mundo? Sí. Le  llaman a veces iluminación, mesías interior. Es un estado de plena consciencia. Es entrar en contacto con tu ser superior, original y ligar tu mente, corazón y voluntad a Él. La iluminación está más allá de la mente dual, en la Unidad y Unicidad del Todo.

El ser humano no nace como un ser terminado. Nace con el potencial de alcanzar los cielos y las estrellas, de construirse a sí mismo, a consciencia, y reconocerse como un ser de Luz. También tiene  la no-capacidad de confundirse y destruirse, cuando se aleja de su esencia infinita, toda vez que confunde la Luz con la obscuridad. El amor con el miedo.

Camino a la luz.

Recordar que no hay oscuridad,  es una ilusión. Sólo hay Luz.

Camino a la luz.

En el mundo o nivel en el que habitamos, las realidades para la mente, a veces no son tan claras,  para nada las cuestiones son en blanco y negro. Erróneamente la mente humana, mientras está funcionando dentro de un patrón de separación y aislamiento, en una función de interpretación dual, o dicotómica,  ve al mundo escindido, generando dolor y sufrimiento.

 Eso no significa que no existe "el bien y el mal". Estas  "polaridades" son una consecuencia de las decisiones tomadas al nivel de una mente que sufre o que se duele, que carece. Dentro de la ilusión, o del engaño. En realidad solo hay bien, sólo hay Luz. Se está completo. Se es.

En la realidad, si acaso, encuentras claroscuros, y hay múltiples tonalidades de una combinación casi infinita de colores. Esa es la realidad: solo hay Luz.

Entonces el reto es recordar que la mente es sólo un instrumento, que yo soy la consciencia detrás de  su uso. Que yo, la consciencia, decido, que estoy por arriba del nivel de la mente. Y que sé que mi estado original es regresar en el ahora,  a una función de unidad, de realidad espiritual, en donde todo es Uno. Y para ello sólo hace falta reconocerlo…

Hoy por hoy,  ir separando, ir depurando, ir diferenciando, dentro y fuera del ser, es deseable, más no la puerta más directa a nuestro nivel superior, o fuente de mayor Luz interior. Toma demasiado tiempo. Nos permite sublimar, sí, el dolor y el sufrimiento.

Pero si quieres salir de éstos,  sólo recuerda: en realidad, en el ahora, Somos Uno. Y ese Uno es bueno. Todo, absolutamente todo, es para bien. Todo es Luz. Sólo permite, y se uno con el Todo y todo con el Uno.

Y si estás aún en el camino. Si amas el devenir de los senderos, y disfrutas los paisajes verdes, así como las cenegas. Para no quedar atrapado una y otra vez dentro del espejismo de la mente dual, recuerda que este mundo físico, es un mundo de procesos, no de funciones terminadas. Y que la mente es sólo un instrumento a tu servicio, que tú no eres ella. Que el ser humano es perfectible, más no es perfecto. Reconocer estas tres cosas te libera.  Esto no puede entenderse desde la mente. Sólo se vive desde la conciencia. La mente dual esa sabiduría  no la tolera, se retuerce, se enfrasca, se muerde la cola, se enreda.

No sufras. Salte de vivir dentro del nivel de la mente, si la habitas, la mente  se convierte en una caja de laberintos, en el mejor de los casos, es sólo un instrumento: está limitada.  Si la mente es el instrumento tu eres tú, eres el concertista.

No eres tus pensamientos, ni tus sentimientos, ni tus deseos, ni tus sensaciones, ni tus percepciones, ni demás. Ni siquiera eres la suma de todos ellos. No eres la mente. Eres la consciencia ligada al alma, quien es capaz de dar guía y uso al instrumento. Tú eres el Uno que está por encima de la mente dual. La abarcas y la afinas. La entrenas, la usas.

Recuerda, no somos perfectos, en este mundo no hay nada que lo sea. Hay belleza dentro de la imperfección. Reconocer esto, puede ser tu primer paso. Ser perfectibles, nos hace seres perfectos. Lo que nos permite trincarnos a la Luz, ver la Realidad, Amar, Crear y dejar de ver en espejo… por decisión propia.

 

jueves, 1 de octubre de 2015

Psicología positiva: 13 consejos clave para mejorar la calidad de nuestra experiencia de vida.

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.
La Psicología Positiva es el estudio científico de las bases del bienestar y de la felicidad.
Psicología positiva: 13 consejos clave para mejorar la calidad de nuestra experiencia de vida.

Tip 1. Practica actividad física: Expertos aseguran que hacer ejercicio ayuda a mejorar el ánimo. 30 minutos de ejercicio es el mejor antídoto contra la tristeza y el estrés.

Tip 2. Desayuna: Algunas personas se saltan el desayuno por falta de tiempo o para no engordar. Estudios demuestran que desayunar te da energía, te ayuda a pensar y desempeñar exitosamente tus actividades.

Tip 3. Agradece a la vida todo lo que tienes: Escribe en un papel 10 cosas que tienes en tu vida que te dan felicidad. ¡Enfócate en las cosas buenas!

Tip 4. Sé asertivo: Pide lo que quieras y di lo que piensas. Ser asertivo ayuda a mejorar tu autoestima. Ser dejado y quedarte en silencio genera tristeza y desesperanza.

Tip 5. Gasta tu dinero en experiencias: Un estudio descubrió que el 75% de personas se sentían más felices cuando invertían su dinero en viajes, cursos y clases; mientras que sólo el 34% dijo sentirse más feliz cuando compraba cosas.

Tip 6. Enfrenta tus retos: Estudios demuestran que cuanto más postergas algo, más ansiedad y tensión generas. Escribe pequeñas listas semanales de tareas y cúmplelas.

Tip 7. Pega recuerdos bonitos, frases y fotos de tus seres queridos por todos lados: Llena tu nevera, tu computador, tu escritorio, tu cuarto, TU VIDA de recuerdos bonitos.

Tip 8. Siempre saluda y sé amable con otras personas: Más de cien investigaciones afirman que sólo sonreír cambia el estado de ánimo.

Tip 9. Usa zapatos que te queden cómodos: Si te duelen los pies te pones de mal humor
 asegura el Dr. Keinth Wapner, Presidente de la Asociación Americana de Ortopedia.

Tip 10. Cuida tu postura: Caminar derecho con los hombros ligeramente hacia atrás y la vista hacia enfrente ayuda a mantener un buen estado de ánimo.

Tip 11. Escucha música: Está comprobado que escuchar música te despierta deseos de cantar y bailar, esto te va a alegrar la vida.

Tip 12. Lo que comes tiene un impacto en tu estado de ánimo:
- No te saltes comidas, come algo ligero cada 3 ó 4 horas y mantén los niveles de glucosa estables.
- Evita el exceso de harinas blancas y el azúcar.
- ¡Come de todo!
- Varía tus alimentos.

Tip 13. Arréglate y siéntete atractivo: ¡Ponte guap@! El 41% de la gente dice que se sienten más felices cuando piensan que se ven bien.

Tip 14. Cree fervientemente en Dios que con El nada es imposible!... ¿Agnóstico(a)? Tómalo como si fuera medicina, encuentra tu versión espiritual de ello... está científicamente comprobado que es saludable hacerlo!

domingo, 13 de septiembre de 2015

Para quienes esperan que el hombre violento cambie...

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.

Violencia masculina en la pareja


Sobre el deseo de ella de que él cambie
 
y la resistencia al cambio de él…

 
Escrito por Sarah Russek de Weiss,
 
psicoterapeuta Cognitivo. Conductual

 

Si eres una mujer que soporta la violencia de un esposo que te maltrata, sabes que a los ojos de un observador externo simplemente no deberías permitirlo. Que deberías separarte.
Pero no lo haces.
Puede ser que tengas temor al castigo o a las represalias,  o que te sientas sin medios alternativos de apoyo económico. Quizá te preocupen tus hijos, o que aún sientas que le necesitas a él para no estar sola. Quizá no encuentras apoyo en la familia y/o amigos; y te da miedo la estigmatización de ser “divorciada”.
O quizá simplemente estás esperando que él cambie…
 
Que no te sorprenda que  pudieras estar esperando que él cambie. Sabes, no eres la única, es parte del síndrome de la mujer maltratada esperar que eso suceda. Estudios cualitativos integrales en Estados Unidos, África, América Latina, Asia y Europa, revelan que esperar “a que él cambie” es un factor que puede determinar que las mujeres maltratadas continúen en una relación violenta. Muchas veces esa falsa esperanza es lo que permite que siga el círculo de la violencia.
 
En realidad las posibilidades de que suceda “que él cambie” son muy bajas. En la absoluta mayoría de los casos las posibilidades son nulas. La resistencia al cambio por parte de los hombres violentos con la pareja, es parte de su perfil como hombres golpeadores.
 
Incluso en aquellos hombres golpeadores que acceden a asistir a un tratamiento psicológico, la resistencia al cambio es uno de los rasgos más característicos. Mientras más se les presiona para cambiar, más se resisten.
 
También existen hombres violentos aparentemente muy amigables y seductores. Quienes falsamente consienten a todos los señalamientos e indicaciones de las personas involucradas o interesadas en que la violencia hacia determinada mujer se contenga. Pues adulan y hacen creer que están dispuestos a cambiar, cuando en realidad la resistencia al cambio impera en ellos. Simplemente no creen que algo esté mal en ellos, o que deban cambiar nada.
 
Un hombre maltratador generalmente tiene un mal pronóstico.  Aún si finalmente “alguien hablara” con él para convencerlo. Difícilmente él entrará en razón. El hombre violento, tratará de esquivar la situación e irse por las ramas, si es que no cuestiona o confronta a la bien intencionada persona en cuestión. Y si el interlocutor “le impone”  por alguna razón, el hombre violento optará por seducirlo, “hacerle la barba”. Buscará manipular la situación a su favor siempre, ya sea que quien trate de convencerlo sea un familiar, líder comunitario, sacerdote, amigo o terapeuta. En ninguno de los casos se asumen a sí mismos como golpeadores.
 
En este sentido la problemática se parece a la de las drogas: la negación típica de los adictos a reconocer su adicción es muy similar a la del agresor para reconocer su responsabilidad sobre su conducta violenta, o sobre la necesidad de cambiar.
 
Los  especialistas a nivel mundial en el tema, han estimado que menos del 1% de los esposos agresores derivados a tratamientos específicos llegan a reconocer que necesitan cambiar y quieren realmente cambiar.
 
Hay algunos hombres violentos que aparentemente por su propia cuenta buscan ayuda. Aunque técnicamente pareciera que buscaron ayuda por su propia voluntad, como si “realmente quisieran cambiar”, en realidad existen otros motivos que los impulsan. Muchas veces es por temor a que se termine el vínculo con su pareja. Pocos son los que realmente aceptan la ayuda porque perciben tener un problema.
 
Más de un marido violento regatea con su compañera frente al  terapeuta poco experimentado o cualquier tercero que se haya prestado de “mediador” o “ayuda”.  Los hombres violentos hacen todo para hacer los menos cambios posibles. Además de que es muy probable de que manejarán la situación como si fuera “un problema de dos” o “totalmente un problema de ella, por loca, irresponsable, ladrona, mentirosa, etc.”¡A veces hasta llegan a convencer al interlocutor! Cuando en realidad él, quien ejerce el abuso emocional o la violencia, es el único responsable de su conducta. No hay nada, absolutamente nada, que justifique la violencia.  
 
Algunos hombres violentos, -si llegan a ver decidida a su esposa a separarse y perciben “que va en serio”-, cuando bien les va, a veces acuerdan ir a tratamiento sólo para ir un par de sesiones; con el objeto de regresar a su casa a la normalidad, “para reconciliarse” o para que su esposa no le denuncie.
La mayoría de los hombres golpeadores  consideran que el problema está en la mujer, sin focalizar su propia violencia. Sencillamente creen que si alguien tiene que cambiar es ella.
Y quizá tengan razón… pero no de la forma que ellos creen.
 
 A veces la persona maltratada puede sentirse tan limitada que “no hacer nada” es la mejor manera que ha encontrado hasta ahora de protegerse a sí misma y a sus hijos. Pero no te engañes, él no va a cambiar, busca ampliar tus opciones y si no las tienes créalas.
Que él no cambie no implica que tú no cambies.
Recuerda que tú si puedes hacer algo.
Hay quienes están especializados en este tipo de problemática y te apoyarán para que recuperes tu fortaleza interna y el ser dueña de ti misma.
¿Hace cuánto que perdiste tu capacidad para la alegría? Recupérala.
Mereces una vida sin violencia.

martes, 8 de septiembre de 2015

Bullying: unas palabras de asesoría para los padres

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.



Bullying

Abrir la comunicación y mostrar el apoyo de los  padres a los hijos puede hacer una gran diferencia.

Por Sarah Russek de Weiss

psicóloga y terapeuta cognitivo-conductual

            
    Cuando un hijo o hija se siente indefenso y piensa que decir o contar lo que le pasa “no va a servir de nada” , y a la vez piensa que  “no se vale acusar”, que hablar es “ser chismoso” o que le dirán "eres un soplón”,  es muy posible que los padres no se enteren del sufrimiento por el que están pasando sus hijos en manos de sus compañeros o incluso en manos  de otros adultos, en los que han confiado.

                El bullying es un fenómeno, que se forma con  una combinación mortífera de elementos: Un bully que obtiene lo que quiere de su presa, a quien sobaja maltratándola CONSTANTEMENTE. Una víctima que teme decir o contar, observadores que miran indiferentes o temerosos, cómplices que  participan o alientan el bullying, TESTIGOS QUE VEN PARA OTRO LADO y adultos que ven el bullying, como algo “normal”, o como simples bromas, o como parte de “crecer”, como diciendo “niños son niños”. O simplemente, adultos descuidados que “no se enteran” o no quieren enterarse.

                ¿Por qué un hijo no cuenta sobre el bullying a sus padres?

·         Siente vergüenza.

·         Tiene miedo de amenazas y consecuencias.

·         No cree que alguien pueda ayudarle o no cree que nadie vaya a ayudarle.

·         Se siente indefenso y sin esperanza.

·         Compró la mentira de que el bullying es “parte de crecer”.

·         Puede creer que los adultos también creen esa mentira, o ve que ellos también  hacen bullying o que minimizan el bullying.

·         Cree que acusar a un compañero es algo malo, nada “cool”, o nada bien visto.


Platica con tus hijos cada día de lo que pasa diariamente y pon atención a posibles señales de alarma, como desánimo por la escuela, baja en calificaciones, aislamiento, pérdida de alegría y espontaneidad, miedos, inseguridad, etc.


También le puedes preguntar:

¿Hay algún bully o algunos bullies en tu clase?

¿Qué tipo de cosas dicen o hacen?

¿Hay algún niño al que estos bullies escogen cada vez?

¿Alguna vez te han hecho bullying a ti?


Mensajes para tu hijo importantes:

·         Te escucho, estoy aquí para ti, te creo, no estás solo en esto.

·         No es tu culpa.

·         Hay cosas que puedes hacer.

·         Es importante reportar el bullying al personal de la escuela, yo puedo ayudarte si me lo permites; encontraremos la mejor manera.

5 cosas que no deben hacerse, sobre todo si no has sondeado a fondo la dimensión del problema:

·         No minimizar o justificar o explicar el comportamiento del bully.

·         No corras a resolverle el problema a tu hijo.

·         No digas a tu hijo que evite al bully.

·         No le digas a tu hijo que pelee de regreso.

·         No confrontes al bully o a sus padres solo.


Y sobre todo, no dejes de pedir asesoría o  ayuda de algún profesional especializado. Haz equipo con la dirección del colegio.

viernes, 4 de septiembre de 2015

El síndrome del emperador / Padres que queriendo a sus hijos, les dañan cuando les dan de más.

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.


El síndrome del emperador / 

Padres que queriendo a sus hijos, les dañan cuando les dan de más.

Por Sarah Russek de Weiss, Terapeuta Cognitivo Conductual.

Educa al niño de acuerdo a su propio camino, para que crezca y  no se aparte de éste.

- Proverbios 22:6


Llegar a ser considerados una fuente de bien para nuestros hijos, es sin duda un anhelo que todo padre o madre, comparten. Pero es un anhelo que cobra vida de muchas maneras.  Anhelar ser una fuente de bien para otros, es un anhelo del deseo de Dar, sin embargo, saber Dar es sin duda todo un Arte. Un Arte que requiere de una destreza, del manejo de una técnica y de un sentido estético, es decir de un sentido adecuado del equilibrio y las formas…  De hecho, para muchos, es más difícil saber Dar que Recibir… Y cuánto más cuando se trata de los hijos.
En ocasiones los papás y las mamás dan a sus hijos sin un formato  adecuado, causándoles  un daño, aún cuando la intención primera en su corazón sea positiva.  Dar  de maneras inconvenientes puede  resultar  en una situación que es todo lo contrario a una  bendición. Por ejemplo,  al  darlo todo desproporcionadamente,  al sacrificarse desmedidamente  para que no sufran, es muy probable que se les esté impidiendo un adecuado desarrollo y por lo tanto la capacidad de llevar una vida adulta plena.
Por difícil que parezca  a veces los progenitores no advierten que están dando de manera desmedida.  A veces no toman conciencia que al Dar a sus hijos inadecuadamente, más que ser una fuente de bien, se están convirtiendo en una fuente de mal para ellos. Tomemos por ejemplo, el caso de los niños que padecen lo que los  psicólogos e investigadores llaman “El Síndrome del Emperador”.
El Síndrome del Emperador es generado en los hijos, cuando los Padres -en su afán de hacerlos felices a toda costa y de que no sufran jamás-, simplemente dan de más. Los niños piden y ellos dan (aún lo que no piden y aún lo que no pueden dar).  Estos padres para poder satisfacer su propio deseo de Dar, se dicen cosas a sí  mismos como: “Es que está creciendo…” “Es que todos en su clase lo tienen…” “Es que no quiero que sufra.”   . Estos padres mandan el mensaje constante a sus hijos de que  “son los reyes”, “quienes  verdaderamente mandan” o de que “no les toca como hijos encargarse de aquello que genere incomodidad o frustración, que “eso es cosa de los papás”. Dar un poder desmedido (si bien,  incapacitante)  a los hijos, es la raíz principal de este Síndrome.
Los niños emperadores a los -que sus padres, en su anhelo de ser una bendición para ellos, les han dado todo sin límites “para que no sufran”- se convierten en niños cuyo síndrome se caracteriza por su incapacidad para tolerar las dificultades de la vida, ya que les faltó aprender  precisamente, una adecuada  tolerancia a la frustración. 
Sus padres se desvivieron con tal de que ellos “mientras estuvieran creciendo, jamás sufrieran, jamás se frustraran, etc.” A estos niños y adolescentes  les cuesta mucho trabajo por lo tanto, adaptarse ya no sólo al dolor que conlleva a veces vivir, tampoco se pueden adaptar a los diferentes encuadres sociales, académicos, laborales, etc.  Simplemente les cuesta mucho asirse de la vida, sufren y culpan a sus padres, pues no les dan más o suficiente; y nunca será suficiente.
Los hijos de los padres que dan demasiado, han vivido en un entorno casi libre de frustraciones y de oportunidades para probar sus propias fuerzas al salir adelante de sus propios problemas. Por ello, padecen de una vulnerabilidad, a veces crónica, ante las dificultades. No poseen la adecuada estructura mental  o cognoscitiva para resolver las contrariedades que se van presentando en su vida. Sus padres siempre les resolvieron los problemas, por lo que, en ese afán de protegerles, no les permitieron afrontar las consecuencias de sus actos. Es decir, no les permitieron aprender a valerse por sí mismos.
A veces esta sobreprotección de los padres hacia sus hijos, fue gestada ante la duda de si estaban criando bien a sus hijos o no. Es decir, que ante el temor de llegar a ser padres demasiado fríos, distantes o duros, les protegieron con mimos excesivos o evitándoles todo malestar, dolor o sufrimiento. A veces son padres que dieron de más al dar lo que ellos no tuvieron.
Como toda la responsabilidad fue asumida siempre por los padres, estos niños generan dependencia, falta de iniciativa, egoísmo, intolerancia, desadaptación y tiranía. Son hijos de padres que incluso llegaron literalmente a sacrificarse por ellos: con tal de darles el coche, el celular que ellos mismos no tienen, el viaje… En este esquema los padres están al servicio de los hijos, de ahí que “los pequeños” se vuelvan unos verdaderos tiranos, tal cual como emperadores, y los padres, sus esclavos. Es importante decir que este fenómeno no tiene que ver con clase social, nivel educativo o capacidad económica de los padres. La raíz del problema, como mencionamos arriba,  está en el esquema de creencias que los padres tienen en su mente acerca de qué es ser “buenos padres”, son las ideas de “que los hijos no sufran”, “que los padres nos tenemos que hacer cargo”, etc. Las que generan  un desbalance al momento de Dar.
Cuando un niño ha recibido desmedidamente,  ha recibido  poder y control desmedidos. De ahí que, cuando un hijo ha vivido bajo la falsa idea de que es “rey” y de que “sus papás están a su servicio”, de que “el mundo está para obedecerle”. Un daño grave  ha vulnerado la psique de ese niño o adolescente y su capacidad para lidiar con la realidad.
Para ser unos padres que sean una fuente de bien para sus  hijos, es importante recordar que la meta debe ser  que los niños vayan generando su propio repertorio de afrontamiento, que puedan asumir de acuerdo a su edad sus responsabilidades y las consecuencias de sus actos. Que   acrecienten su capacidad para la supervivencia, para lidiar con las incomodidades o dolores de la vida.
Para  crecer sanos necesitan aprender a tolerar frustraciones. No ganamos nada buenos si se les protege de los malestares o  dificultades razonables que corresponden a la edad o la maduración del niño.
Los hijos en realidad, para recibir un amor sano de nuestra parte: necesitan que les permitamos  aprender a experimentar sufrimiento, aunque cobijados por nosotros como padres. Y un poco del malestar que les va trayendo la vida, lo suficiente para que aprendan de estas  experiencias a resolverse quiénes son, y a vivir su propio camino de crecimiento y respuesta; y sobre todo a ser capaces de padecer esos malestares o incomodidades al Dar ellos mismos a otros.
Para ser una fuente de bien para los hijos, como padres debemos ser una autoridad basada en el diálogo, con amor, sensibilidad, comprensión.  Explicarles lo necesario, dejarles vivir, elegir y afrontar consecuencias.  Enseñarles análisis y reflexión en la toma de sus  decisiones, modelarles con el ejemplo una actitud de ret .
Pero para ello, es necesario que la última palabra, sea siempre la de los padres. No la de los hijos. La democracia se deja para lo opcional y accesorio, no para lo esencial. En lo substancial, en lo básico, en las cuestiones de criterio, los padres son los que deben tomar  las decisiones  teniendo en mente el bien último de sus hijos, aunque para llegar a éste haya que pasarse por unas buenas dosis de frustración. 
Cuando nos mueva el deseo de “dárselos todo” démoslo, pero a largo plazo, no a corto plazo...  Cumplamos así con el anhelo de Dar y ser una Bendición para nuestros hijos,  una  fuente de Bien para ellos.


viernes, 28 de agosto de 2015

IM A NEW SOUL I CAME TO THIS STRANGE WORLD...

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.

Un corto video que inspira de forma cómica a reflexionar...
-lo profundo de la vida es más simple de lo que uno cree.
                                                      (desenrédate con TCC)


IM A NEW SOUL I CAME TO THIS STRANGE WORLD

he aquí la letra:

IM A NEW SOUL I CAME TO THIS STRANGE WORLD
HOPING I COULD LEARN A BIT ABOUT HOW TO GIVE AND TAKE.
BUT SINCE I CAME HERE FELT THE JOY AND THE FEAR
FINDING MYSELF MAKING EVERY POSSIBLE MISTAKE

LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA...

IM A YOUNG SOUL IN THIS VERY STRANGE WORLD
HOPING I COULD LEARN A BIT ABOUT WHAT IS TRUE AND FAKE.
BUT WHY DONT PLEASE TRYING TO COMMUNICATE F
INDING JUST THAT LOVE IS NOT ALWAYS EASY TO MAKE.

LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA...

THIS IS A HAPPY END CAUSE YOU DONT UNDERSTAND
EVERYTHING YOU HAVE DONE WHYS EVERYTHING SO WRONG
THIS IS A HAPPY END COME AND GIVE ME YOUR HAND
ILL TAKE YOUR FAR AWAY.

IM A NEW SOUL I CAME TO THIS STRANGE WORLD
HOPING I COULD LEARN A BIT ABOUT HOW TO GIVE AND TAKE
BUT SINCE I CAME HERE FELT THE JOY AND THE FEAR
FINDING MYSELF MAKING EVERY POSSIBLE MISTAKE

LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA...

LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA....


¿Cómo hablar del divorcio con tus hijos?

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.



¿Cómo hablar del divorcio con tus hijos?

“Cuando me enteré del divorcio de mis padres cambió mi vida”

- joven de 21 años  hablando en  retrospectiva.


Por Sarah Russek de Weiss, Psicóloga y Psicoterapeuta Cognitivo conductual.

            El miedo a ver sufrir a los hijos es natural. Por lo que la simple idea de hablarles de divorcio genera un estrés importante. Algunas personas prefieren simplemente posponer cualquier decisión al respecto, o sencillamente permanecer en  matrimonios insatisfechos. Incluso destructivos. En algunos casos sólo para descubrir una y otra vez nuevos niveles de destrucción y violencia. Paradójico al deseo inicial de proteger de cualquier sufrimiento a los hijos, la simple posposición o no resolución de los conflictos agrava más los problemas causando simplemente más perjuicio y por lo tanto sufrimiento.

            Aún y cuando las parejas sí deciden separarse, a veces se separan sin decir a los hijos nada… ¡simplemente nada! Por ridículo que esto parezca, es frecuente. Obviamente no comunicar a los hijos una decisión como ésta es debido al miedo a dañarles.

            Sin embargo, hacer así, les causa más daño y dolor que si los padres les  hubiesen comunicado la decisión del divorcio o la separación adecuadamente.

            Hay formas más adecuadas y menos adecuadas de comunicar la decisión de un divorcio. Y es importante que los padres que estén considerando separarse lo tomen en cuenta. Una buena comunicación puede hacer la gran diferencia entre el dolor natural pero manejable de un divorcio, versus un sufrimiento que pueda representar un daño subsecuente.

            Si no hay una adecuada información, los hijos se fabrican falsas ilusiones e  ideas erróneas respecto al futuro, la situación, o el amor hacia ellos. En consecuencia tardan más en comprender, en aceptar y en sobreponerse.

            De ahí la importancia de planear, cuándo, dónde, y quién o quiénes informarán a los hijos del divorcio. (En una encuesta realizada por Sand Castles y Gary Newman en E.U. en 1998, el 25% de los hijos de padres en proceso de divorcio se enteran por otras personas diferentes a sus padres, por amigos, por parientes, por profesores, por amigos de sus padres, otros; o por simplemente haber escuchado a sus padres hablar de eso.)

            Planear la manera de informar a los hijos del divorcio requiere idealmente la participación de ambos padres, independientemente de la edad de los hijos; y hay varios puntos a tomar en cuenta, por ello lo mejor es buscar la ayuda de un  profesional capacitado que pueda dar una asesoría  especializada y personalizada a detalle.

            Esta planeación puede ser asesorada o dirigida dentro del marco de una Terapia Cognitivo Conductual de Pareja, o Individual.
RECUERDA: SOMOS LIBRES DE ELEGIR, PERO NO DE LAS CONSECUENCIAS DE NUESTROS ACTOS,
POR ELLO ES IMPORTANTE LA ANTICIPACIÓN, LA  PLANEACIÓN, ASÍ COMO LA PREVENCIÓN.

lunes, 17 de agosto de 2015

Algunas palabras sobre el afán perfeccionista

Transformando emociones de la adversidad a la fortaleza.



¿Parece que nunca nada sale bien o que no es como te lo imaginabas...?

 -Por Sarah Russek de Weiss, psicoterapeuta Cognitivo Conductual

Pues qué crees... LA VIDA ES EL 10% DE LO QUE TE ESTÁ OCURRIENDO.
EL 90% ES CÓMO REACCIONAS.

Una buena manera de solucionar ese sentimiento de insatisfacción constante, de frustración o de que “nada es suficiente”:

¡ABRAZA LA IMPERFECCIÓN!

Después de todo, lo “perfecto” es enemigo de lo “bueno”.

En serio, este es un sencillo plan.

Aprende a retar tus pensamientos  automáticos perfeccionistas.

Pero primero, aprende a reconocerlos. Por ejemplo,

Cuando empieces a pensar otra vez,  cosas como:

“necesito limpiar a fondo mi casa antes de invitar a mis amigos” (lo que significa que rara vez les invitas o que cuando lo haces no precisamente lo gozas)

 “necesito bajar de peso para poder ir al gimnasio” (lo que significa que la sola idea de estar pasado de peso y de sentirse evidenciado al hacer algo al respecto, te impide moverte y dar solución a tu sobrepeso)

“no puedo relajarme hasta saber que todo está en orden” (rara vez podemos estar seguros de que toooodo está bajo control, si te esperas a tener esa certeza para ser feliz, probablemente nunca lo serás),

-Esos son solo unos pocos ejemplos de los pensamientos automáticos del tipo perfeccionista.

 Desafía esos pensamientos automáticos; si no sabes cómo:

TOMA UNA TERAPIA COGNITIVO CONDUCTUAL

Y date permiso de ser feliz.

Un tip: revisa tu jerarquía de valores y actúa en concordancia. Pasar  tiempo de calidad con tu pareja e hijos puede ser que sea el más alto de tus valores en jerarquía de principios. Así que puedes generar  pensamientos más acordes con ese valor, pensamientos que además te darán fuerza para enfrentar ese afán perfeccionista y abrazar, en vez de la angustia, el gozo.

Por ejemplo:
“No todo lo que es digno  de hacerse, vale la pena que se haga de forma perfecta”
y otro podría ser:
“La persona perfecta es humana, por lo tanto, es imperfecta”
o sea,
nadie es perfecto”,
o aún mejor,
                      "wabi sabi”  -del Japonés:
“encuentra lo perfecto dentro de lo imperfecto”.